BAR EL PASILLO DE JESÚS-
Calle España, esquina a Moncayo
Tlf. 661246761-
- FUENGIROLA
LOCAL MUY COQUETO
PUCHERO CARTAMEÑO
BACALAO EN SALSA VERDE |
BOQUERONES EN VINAGRE |
La profesionalidad de Jesús es indiscutible. Por algo bebió su profesión en posiblemente el mejor restaurante que tenía la Costa del Sol en los años 70 a los 90. nada más y nada menos que en el restaurante "La Hacienda" de Marbella, donde estuvo, junto a su hermano, bastantes años. No es por casualidad, que su talante profesionalidad y educado trato a sus clientes, sean tenido en cuenta por los que les visitan.
En la cocina, cuenta con la inestimable ayuda de su esposa Mercedes, que cocina a la mil maravilla y consigue darle un sabor especial a unos guisos aprendidos de su madre y abuela, típicos del pueblo de Cártama, como las cazuelas, potajes, pucheros y berzas, que los cambia cada día. Así mismo prepara unas carrilladas y secreto ibérico, junto a un rabo de toro que "quitan el sentío".
También prepara un bacalao en salsa verde, atún con tomate, como unas estupendas albóndigas de merluzas o la magnífica paella que cada sábado , alrededor de las dos de la tarde, tiene encima del mostrador, para los que les gusta esas tapitas de arroz antes de sentarse a las mesas. Todo ello regado con unos estupendos vinos seleccionados de Ribera del Duero, o de Rioja, junto a otras denominaciones de origen, que él sabe seleccionar.
Junto a todo esto, está la extraordinaria forma de atender que tiene Jesús, que creo puede catalogarse de las mejores del sector.
Todo esto hace que las personas que les visitan, tengan asegurado un alto grado de satisfacción. Espero que cuando le visiten, corrobore la opinión que tengo de este establecimiento.
Ya no están los antiguos y fundadores propietarios. Ahora no los he visitado todavía, para opinar sobre este establecimiento.
ResponderEliminarNo tengo idea de como borrar esta reseña, pues desapareció, de la noche
ResponderEliminara la mañana y no se nada de ellos. Hoy hay diferentes dueños y no se como les irá pues está cerrado como muchos, por el maldito covid